MEXICALI.- Para finales de octubre o inicio de noviembre, se espera que haya señales claras en Morena sobre el proceso de selección de candidatos a cargos de elección en Baja California: Gobernador, Diputados locales y Ayuntamientos.
Podría ser la emisión de la convocatoria que marcan los lineamientos de Morena para elegir a los y las candidatas, y como una regla es que todos los cargos en disputa los ocupen militantes de Morena.
Tal como indican las encuestas, Morena arrasaría en las elecciones locales de 2019, ganaría la gubernatura, en manos del PAN desde hace 30 años; la mayoría de los Distritos y los Ayuntamientos de Tijuana, Mexicali, Ensenada, por ejemplo.
Bajo ese escenario, Morena no necesita de alguien externo para competir, con la militancia tiene, porque a quien ponga ganaría bajo la perspectivas de las encuestas o el sentir ciudadano.
El dirigente de Morena en la entidad, Jaime Bonilla, anda ocupado en su cargo como Senador de la república y a partir del primero de diciembre como representante del Gobierno Federal en Baja California, así que él mismo se ha descartado para convertirse en candidato a Gobernador. Entonces quedan dos: Jaime Martíez Veloz y el diputado Víctor Morán. Entre ellos se disputarían, porque son militantes.
Aunque se ha manejado el nombre de Adela Navarro (periodista y co-directora de Zeta), como posible candidata de Morena al cargo de Gobernador de Baja California, todo parece indicar que no necesita Morena figura externa, con los suyos tiene, y la reportera de Tijuana no aceptaría el reto de brincar a la arena político-electoral.
Son muchos los externos que se han acercado a Morena para competir por candidaturas, a nadie se le ha dicho que no, pero uno solo fue descartado y es Arturo González Cruz, el texto de la carta del representante de Morena en el Instituto Estatal Electoral, es más que suficiente que al empresario de Tijuana entienda que el momento no le favorece.
Ya falta poco para que se sigan calentando los «motores» y arranquen las precampañas, obtención de firmas para candidaturas independientes y sobre todo a definirse las señales como Morena en Baja California.
Aunque el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, pidió calma, el ambiente no responde, Rigoberto Campos organiza un despliegue de apoyo a su causa bajo el color guinda.
Y los militantes quieren que no haya externos del PAN, neopan, priístas o del verde, PT o PES.