Por Jaime Delgado
MEXICALI.- Irrumpieron en la paz controlada del Congreso del Estado, a estos manifestantes no le cerraron la puerta del edificio legislativo, sino que los recibieron hasta con aplausos los empleados del Poder Legislativo.
Fueron los empleados de la Auditoria Superior del Estado de Baja California (ASEBC), quienes pusieron los señalamientos públicamente, acompañados y con el apoyo del Sindicato de Burócratas y su líder moral Victoria Bentley, aliada con legislador del PRI como Benjamín Gómez.
Sin embargo, independiente de los gritos de la burocracia del órgano encargado de fiscalizar las cuentas públicas estatales y municipales, hay que colocar la luz en quién y cómo fiscalizan las cuentas públicas en Baja California, qué tanto avance se ha logrado en los gobierno del PAN desde 1989.
Mucho se presume que en Baja California se estrenó la alternancia, pero el avance en la parte de la fiscalización podría afirmar que es poco, por no decir que seguimos igual que hace 30 años, total impunidad en el tema de corrupción.
En Baja California hay resistencia para avanzar, en el tema de combate a la corrupción pusieron todo en manos de los Partidos Políticos, se repartieron las posiciones en el órgano de selección del Sistema Estatal Anticorrupción, ligados al PAN y PRI, ciudadanos que debería de gozar de independencia.
En lo particular, los gobiernos estatales del PAN en Baja California, se han negado en operar un órgano que sirva de contrapeso, el «Orfis» está comprometido y lo que sigue de manipulado electoralmente.
Para muestra se puede señalar el caso de Salvador Sarmiento, Jefe de Auditoría paraestatal, quien tiene a su hijo (del mismo nombre) en la dependencia.
De igual forma se puede localizar en la nómina a Ana María Sánchez, jefe de Auditoría, quienes toman la nómina para heredar. Como si el poder fuera patrimonialista.
Armando Tapia Gallardo, Jefe de Auditoria a Gobierno Estatal y Entidades Autónomas, quien tiene años laborando y metió a su hijo Armando Tapia Duarte, a la misma dependencia.
Armando Tapia siempre ha estado en esa posición desde que el PAN llegó al Poder en 1989, limpiando las cuentas del Gobierno del Estado, y principal cómplice de la corrupción en Baja California, porque se sabe más ded malos manejos en medios de comunicación y no por el «Orfis».
Este personaje propietario de la llave de la Caja de Pandora del Orfis, tiene privilegios que ha logrado meter al «Orfis» hasta su esposa Patricia Duarte.