MEXICALI.- Sarahí García Flores, ahora es la nueva coordinadora del Albergue del DIF estatal donde cuidan a 194 menores de edad, desde bebés hasta adolescentes, en su mayoría. Sin embargo, la llegada de la nueva funcionaria significó mayor desprecio al trabajo realizado en esa institución, que por cierto, la mayor parte no recibirá aguinaldo.
En el albergue del DIF estatal laboran decenas de trabajadores, pero son unos 20 empleados, entre psicólogos, niñeras y administrativos que están bajo el régimen de honorarios y que no tienen derecho a aguinaldo por estar en esa situación laboral, pero siguen lineamientos de empleados con horarios y tareas específicas, como empleados burócratas.
Al plantearle esa situación ilegal a la líder del Sindicato de Burócratas, Selene Gómez, desestimo la situación y mandó al reportero con una asistente que no resuelven ni denuncian nada, solamente son cómplices de esa ilegalidad.
El gobierno del Estado se escuda en este formato para no dar seguridad social ni prestaciones laborales, a pesar de que quienes cuidan la niñez más vulnerable del Estado sigan en un sentido de explotación laboral.
Pero lo más grave, que el nombramiento de Sarahí García Flores, ex director del Instituto de Psiquiatría y burócratas del gobierno en Tijuana, vino a generar más problemas en vez de solucionar, por ejemplo, hace dos días los menores no contaban con agua para beber, tuvieron que utilizar agua con cloro ante la falta de funcionamiento del equipo de purificación que tiene el albergue.
Otra acción de la nueva directora es pintar todo el albergue, borrando murales hechos por los niños y niñas, además de los cuadros de mosaicos los quieren quitar.