MEXICALI.- Antonio Navarrete Castillo, presidente de la Fraternidad Policiaca, denunció irregularidades en el procedimiento de remoción iniciado contra 19 agentes de la zona sur del Valle de Mexicali, quienes fueron señalados como no aptos tras los exámenes de control y confianza aplicados en el C-3.
Navarrete explicó que la causa principal de la sanción se relaciona con observaciones en el examen socioeconómico, donde los policías no pudieron justificar ingresos mensuales de entre 5 mil y 10 mil pesos. El dirigente aseguró que la situación es injusta, pues muchos de los agentes cuentan con empleos adicionales o reciben apoyo económico de sus familias, aspectos que no se reflejaron en la documentación presentada.
El presidente de la Fraternidad Policiaca también criticó la forma en que se citó a los elementos, después de que la Secretaría de Seguridad, bajo la dirección de Tizoc Aguilar, relevara toda la zona operativa de la policía municipal del Valle Sur. Señaló que los agentes permanecieron hasta 38 horas en el C-3 sin tiempo suficiente para reunir la documentación requerida y sin condiciones adecuadas de alimentación y descanso, calificando la situación de “ignominiosa”.
Por ello, pidió al síndico procurador y a la Comisión de Honor y Justicia garantizar el debido proceso, recordando que resoluciones anteriores de este órgano fueron “draconianas” y carentes de proporcionalidad. Navarrete exigió que en esta ocasión se permita a los agentes acreditar sus ingresos.
De los 29 elementos reprobados en los exámenes, diez fueron dados de baja por indicadores graves; sin embargo, en los 19 restantes no existen elementos sustantivos que justifiquen su separación.
El dirigente adelantó que, de no respetarse las garantías de los afectados, se recurrirá nuevamente a los tribunales, aunque los juicios podrían prolongarse hasta dos años. Mientras tanto, reiteró su llamado a la sindicatura para que el proceso se conduzca con objetividad y transparencia.