Por Jaime Delgado
MEXICALI.- Mientras que el Consejo General del Instituto Electoral (IEEBC) autoriza millonarias partidas para el gasto de campañas, el sector salud carece de las más elementales herramientas y condiciones para atender a los pacientes.
Por ejemplo, en el Hospital General de Mexicali hay un edificio con espacios para consultorios sin uso, el inmueble ya fue entregado por los constructores desde el año pasado, pero no hay dinero para médicos mucho menos mobiliario.
Y para que no haya duda, en el Hospital «5 de Diciembre» del ISSSTE no hay refrigeración, y las atenciones del personal están para llorar.
Pero no todo termina aquí, el sistema de salud está tronado y la Rickettsia así lo hizo ver desde el 2007. Los pacientes primero buscaron consultorios «Similares» antes de ir a las instituciones de Gobierno.
Todo esto ocurre cuando en el Consejo General los Partidos Políticos molestos reclaman el retraso del dinero para campaña, decenas de millones de pesos van a parar a las cuentas bancarias de los Partidos Políticos.
No hay que olvidar que en la presente Legislatura se aprobó el aumento para el gasto de los Partidos Políticos en un 700% siguiendo lineamientos federales que no eran obligado aplicar, pero a solicitud de los Partidos a través del Consejo General se realizaron las reformas legales en la Cámara de Diputados.
Para los Partidos Políticos sí hay dinero, para la organización de desayunos y cenas, generan empleo temporal contratando a personas para que vayan a pedir el voto, convencer a los votantes, mientras tanto los grupos vulnerables del Estado recienten cada día más las carencia de Salud, son quienes pagan los platos rotos.
Esa es la contradicción de nuestra democracia, porque se supone que la democracia es para mejor la calidad de vida de la población, pero se pervierte con una partidocracia depredadora de los recursos públicos, camarillas que han encontrado en el gasto político electoral un modus vivendi lleno de privilegios, con sueldos altísimos, son aquellos que administran el juego electoral.
¿Pero por qué sucede esto? Por un lado no se ha registrado una acción de rechazo contundente de parte de la sociedad, como en España que haya movilizaciones, a pesar de que cada día hay más irritación social.
Se requiere un nuevo modelo del gasto público, que debería ser el tema de discusión en las campañas. Cómo distribuir el dinero, bajo nuevos principios y parámetros, el presupuesto estatal transparente y municipal.
Estos parámetros ya existen pero ninguno de l@s candidat@s a los distintos puestos traen este tema con precisión, aún cuando hay señalamientos de parte de uno de los candidatos con recortar privilegios, pero no hay un planteamiento concreto para toda la administración.
¿Por qué un Diputado tiene que comprar un carro del año como primera acción de gobierno?
¿O que nos enteramos que adquieren mansiones cuando son diputados electos o alcaldes electos?
El gasto electoral debe ir a la baja.
Reducir privilegios de la alta burocracia política del Estado, tanto de los tres Poderes como los Ayuntamientos.
Atender grupos vulnerables y reparto de apoyos bajo supervisión de órganos consultivos para contrarrestar las acciones clientelares de los subsidios.
@Jaime_Delgado